Corea del Sur refuerza medidas contra la evasión fiscal en criptomonedas
El Servicio Nacional de Impuestos (NTS) de Corea del Sur ha emitido una contundente advertencia a los individuos que utilizan criptoactivos para evadir sus obligaciones tributarias. La autoridad ha declarado que su alcance no se limita a los intercambios en línea, sino que también incluirá inspecciones domiciliarias y la confiscación de dispositivos de almacenamiento, como billeteras frías, que antes se consideraban un refugio seguro para ocultar fondos.
Esta estrategia surge en un contexto donde el número de inversores surcoreanos en activos virtuales ha crecido exponencialmente, pasando de aproximadamente 1,2 millones a 10,77 millones en un lapso de cinco años hasta junio pasado, según informes de Cryptopolitan. Este crecimiento ha llevado a que las criptomonedas, debido a su naturaleza pseudónima, sean empleadas cada vez más en esquemas de evasión fiscal, presenting un desafío significativo para las autoridades en comparación con las transacciones financieras tradicionales.
Ampliación de los poderes de fiscalización del NTS
La Ley de Recaudación Nacional otorga al NTS la facultad de solicitar información de cuentas a los intercambios locales y de congelar fondos pertenecientes a contribuyentes morosos. Con la reciente intensificación de su enfoque, la institución planea llevar a cabo inspecciones domiciliarias y confiscar discos duros y otros dispositivos de almacenamiento digital cuando existan sospechas fundadas de evasión.
Estos esfuerzos no son enteramente nuevos. Ya en 2021, el NTS realizó una incautación masiva de criptomonedas, valorada en 71.200 millones de wones surcoreanos, a 5.741 contribuyentes de alto patrimonio. Los inspectores tienen la capacidad de solicitar datos de Conoce a Tu Cliente (KYC) a los exchanges para identificar y bloquear los activos digitales de los evasores, en virtud de sus derechos de inspección establecidos en la legislación fiscal.
El diputado Kim Young-jin, del Partido Democrático de Corea, reveló que desde 2021 se han confiscado activos digitales a 14.140 morosos, acumulando un valor total de KRW 146.100 millones, lo que subraya la magnitud de la evasión detectada y la determinación de las autoridades para combatirla.
Incremento de delitos financieros asociados a criptoactivos
La supervisión de las autoridades no se restringe únicamente a la evasión fiscal. El Servicio de Supervisión Financiera (FSS) ha reportado que el volumen de criptoactivos transferidos desde exchanges nacionales a billeteras frías alcanzó los KRW 78,9 billones durante la primera mitad de 2025. Este volumen de movimientos fuera de las plataformas reguladas genera preocupación por su potencial uso en actividades ilícitas.
Paralelamente, la Unidad de Inteligencia Financiera (FIU) ha registrado un aumento sustancial en las denuncias por transacciones sospechosas. Entre enero y agosto de 2025, los operadores de activos virtuales presentaron 36.684 reportes, lo que representa una cifra superior al total combinado de los dos años anteriores (35.734 casos), ilustrando una escalada notable en la detección de posibles actividades delictivas.
El Servicio de Aduanas de Corea también ha alertado sobre el uso de criptomonedas en actividades ilícitas. Entre agosto de 2021 y agosto de 2025, los delitos relacionados con criptomonedas sumaron un total de KRW 9,5613 billones. De esta cifra, un contundente 90,2% correspondió a esquemas de lavado de dinero. Un caso reciente, ocurrido en mayo, involucró la captura de un operador que había intercambiado ilegalmente KRW 57.100 millones en efectivo, provenientes de un importador ruso, por su equivalente en dólares en la stablecoin Tether. Esto pone de manifiesto la sofisticación de los métodos empleados por los criminales.
Riesgos de las stablecoins y la respuesta legislativa
El legislador Seongjun Jin ha manifestado su preocupación ante el creciente empleo de stablecoins como medio de pago en la economía real. Jin advirtió que esta tendencia amplifica los riesgos de delitos cambiarios y lavado de capitales, señalando que “a medida que las stablecoins se usan cada vez más en transacciones reales, el potencial de que se empleen para delitos financieros internacionales también crece”.
En respuesta a esta inquietud, el parlamentario instó a organismos como la FIU y el Servicio de Aduanas a establecer medidas sistemáticas y robustas para combatir estas nuevas formas de criminalidad financiera. Estas medidas incluyen el rastreo de fondos ilícitos y la identificación de remesas encubiertas, buscando cerrar las brechas que los criminales puedan explotar.
Con estas acciones integrales, Corea del Sur reafirma su compromiso con el establecimiento de un marco regulatorio estricto y efectivo para los activos digitales. Como uno de los mercados de criptomonedas más grandes del mundo, el país busca combinar una supervisión tecnológica avanzada con una coordinación institucional eficaz y sanciones severas para garantizar la integridad de su sistema financiero y prevenir el abuso de las criptodivisas para fines ilegales.