DCG inicia acciones legales contra Genesis por deuda de pagaré
Digital Currency Group (DCG), un conglomerado líder en la industria de activos digitales, ha presentado una demanda formal contra su subsidiaria de préstamos, Genesis, ante el Tribunal de Bancarrotas del Distrito Sur de Nueva York. La acción legal, interpuesta el 14 de agosto, busca la confirmación judicial de una deuda pendiente de más de $105 millones, más intereses, derivada de un pagaré emitido por DCG para respaldar financieramente a Genesis durante la turbulencia del mercado de criptomonedas en 2022.
Esta demanda emerge en un contexto tenso entre ambas entidades, dado que Genesis se recupera de su propia reestructuración de bancarrota y ha iniciado acciones legales previas contra DCG. La controversia subraya las complejidades financieras y los desafíos regulatorios que persisten en el sector de las finanzas descentralizadas (DeFi) y los mercados de activos digitales.
Orígenes de la deuda: el impacto de Three Arrows Capital
La disputa se centra en un pagaré de $1.1 mil millones que DCG extendió a Genesis tras el colapso del fondo de cobertura Three Arrows Capital (3AC) a mediados de 2022. 3AC, uno de los prestatarios más significativos de Genesis, incumplió un margin call de $2.36 mil millones. Este incumplimiento generó un déficit considerable en la capitalización de Genesis Asia Pacific, una entidad propiedad de DCG, lo que comprometió gravemente la estabilidad operativa de Genesis.
Según la queja de DCG, el pagaré se emitió de forma “voluntaria” para estabilizar las operaciones de Genesis y mitigar el riesgo de contagio en el mercado. Sin embargo, DCG argumenta que, a medida que los mercados de criptomonedas se recuperaron, Genesis obtuvo ganancias sustanciales de la colateral asociada a 3AC, superando con creces el valor original del pagaré. Estas ganancias, según DCG, deberían haber reducido el principal adeudado, dejando un saldo remanente de $105 millones que ahora buscan recuperar.
- Junio de 2022: Colapso de Three Arrows Capital (3AC), principal prestatario de Genesis.
- Impacto: Incumplimiento de margin call de $2.36 mil millones y déficit en Genesis Asia Pacific.
- Respuesta de DCG: Emisión de un pagaré de $1.1 mil millones para estabilizar Genesis.
Declaraciones de DCG y el panorama actual
DCG ha emitido un comunicado en el que afirma haber realizado “esfuerzos extraordinarios” para mantener a flote a Genesis en 2022. La demanda actual, según DCG, solo busca que el tribunal “confirme” el estado de reembolso de dicha deuda. Este litigio añade una nueva capa de complejidad a la ya tensa relación entre las dos compañías, que ha sido objeto de múltiples controversias y batallas legales.
A principios de este año, el comité de supervisión de litigios de Genesis presentó su propia demanda contra DCG, su CEO Barry Silbert y otros ejecutivos. Esta acción legal alegaba que miles de millones de dólares fueron “indebidamente extraídos” de la prestamista en 2022, alimentando un ciclo de disputas jurídicas que ha afectado a la reputación y las operaciones de ambas partes.
La bancarrota y reestructuración de Genesis
Genesis es una de las varias firmas destacadas del ecosistema de criptomonedas que sucumbieron a la ola de quiebras que siguió al implosión de FTX. La empresa cesó sus operaciones de préstamo a fines de 2022 y se declaró en bancarrota bajo el Capítulo 11 a principios de 2023. El proceso de reestructuración concluyó el año pasado, lo que permitió a Genesis comenzar a distribuir aproximadamente $4 mil millones a sus acreedores. Las cantidades de recuperación varían en función del tipo de activo y la clase de acreedor.
Como tenedor de capital, DCG se encuentra entre los últimos en la línea de reembolso, una posición que históricamente conlleva un riesgo mayor y un menor porcentaje de recuperación en los procesos de bancarrota. Debido a esto, DCG ha impugnado activamente varias partes del plan de bancarrota de Genesis, buscando proteger sus intereses y maximizar su recuperación en un escenario de prioridades de pago.
La resolución de esta demanda será crucial no solo para DCG y Genesis, sino para la industria en general, ya que podría sentar precedentes sobre cómo se gestionan las deudas interempresariales y las obligaciones financieras en entornos de alta volatilidad y bancarrota dentro del sector de las criptomonedas.