La inversión en criptoactivos ha experimentado un crecimiento exponencial, transformándose en una parte significativa de las finanzas personales para muchos individuos. Sin embargo, este auge conlleva una responsabilidad fiscal ineludible. En España, la declaración de las criptomonedas no es una elección, sino una obligación legal. Comprender el marco normativo actual y los procedimientos necesarios es crucial para evitar sanciones y cumplir correctamente con las exigencias de la Agencia Tributaria (Hacienda).
La obligación de declarar criptomonedas en España
Desde la implementación de diversas normativas, los usuarios de criptoactivos en España están sujetos a obligaciones fiscales específicas. La Agencia Tributaria ha intensificado su supervisión, buscando garantizar la transparencia y el cumplimiento por parte de los inversores en activos digitales. La ignorancia de la ley no exime de su cumplimiento, y las multas por omisión o declaración incorrecta pueden ser sustanciales.
La normativa fiscal española considera las criptomonedas como bienes que se deben declarar bajo ciertas circunstancias, equiparándolas a otros activos patrimoniales en términos de ganancias y pérdidas. Es fundamental distinguir entre los diferentes escenarios que requieren declaración, como la tenencia de criptoactivos en el extranjero y la obtención de rendimientos a través de operaciones con ellos.
Marco normativo clave: Ley 7/2021 y Modelo 720
Uno de los pilares de la regulación fiscal sobre criptomonedas en España es la Ley 7/2021, de prevención y lucha contra el fraude fiscal. Esta ley introdujo modificaciones significativas en la declaración de bienes y derechos situados en el extranjero, incluyendo explícitamente a las criptomonedas.
Anteriormente, el Modelo 720, utilizado para declarar bienes y derechos en el extranjero, no especificaba las criptomonedas. Con las recientes adaptaciones, este modelo se ha vuelto relevante para los tenedores de criptoactivos fuera de España. Es importante destacar que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha declarado desproporcionado el régimen sancionador del Modelo 720, lo que ha llevado a España a modificar las multas, aunque la obligación de declarar se mantiene firme.
La Ley 7/2021, y sus desarrollos reglamentarios, establecen la obligación de informar sobre la tenencia de criptoactivos en el extranjero mediante el Modelo 721 (actualmente en desarrollo normativo). Este modelo persigue que se declaren los saldos que superen los 50.000 euros en el extranjero. Aunque el Modelo 721 aún se está desarrollando, es prudente estar preparado y recopilar la información necesaria para cuando su presentación sea obligatoria.
¿Qué operaciones con criptomonedas deben declararse?
La declaración de criptomonedas no se limita solo a su tenencia. Diversas operaciones generan obligaciones fiscales:
- Intercambio de criptomoneda por fiat (euros): La venta de criptomonedas por moneda fiduciaria genera una ganancia o pérdida patrimonial que debe ser declarada en la base imponible del ahorro del IRPF.
- Intercambio entre criptomonedas: La permuta de una criptomoneda por otra también se considera una alteración patrimonial y debe declararse, aunque no haya conversión directa a euros.
- Minería de criptomonedas: Los ingresos obtenidos por la minería se gravan como rendimientos de actividades económicas o como ganancias patrimoniales, dependiendo del volumen y la habitualidad.
- NFTs y otros activos tokenizados: Los ingresos generados por la venta o intercambio de Tokens No Fungibles (NFTs) o cualquier otro activo tokenizado están sujetos a impuestos como ganancias patrimoniales.
- Dividendos, staking, yield farming: Los rendimientos obtenidos a través de estas actividades suelen tributar como ganancias de capital o rendimientos de capital mobiliario, dependiendo de su naturaleza.
Es fundamental llevar un registro detallado de todas las transacciones, incluyendo fechas, valores de adquisición y transmisión, y el tipo de operación. Plataformas de seguimiento de carteras y herramientas fiscales especializadas pueden ser de gran ayuda para esta tarea.
Impacto fiscal en el IRPF: ganancias y pérdidas patrimoniales
En el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), las ganancias y pérdidas patrimoniales derivadas de la transmisión de criptomonedas se integran en la base imponible del ahorro. La tributación se aplica progresivamente según los tramos establecidos:
- Hasta 6.000 €: 19%
- De 6.000,01 € a 50.000 €: 21%
- De 50.000,01 € a 200.000 €: 23%
- De 200.000,01 € a 300.000 €: 27%
- Más de 300.000 €: 28%
Las pérdidas patrimoniales pueden compensarse con ganancias patrimoniales durante el mismo ejercicio fiscal y, si hubiere un remanente negativo, puede compensarse con un 25% de los rendimientos del capital mobiliario. En caso de seguir existiendo pérdidas, estas pueden compensarse con ganancias patrimoniales de los cuatro ejercicios siguientes.
Cálculo del valor de adquisición y transmisión
Para calcular la ganancia o pérdida patrimonial, se aplica la regla FIFO (First In, First Out), es decir, que las primeras criptomonedas adquiridas son las primeras que se consideran vendidas. El valor de adquisición incluye el precio de compra y los gastos asociados (comisiones de exchange, etc.), y el valor de transmisión es el precio de venta menos los gastos asociados.
Obligaciones para plataformas de criptomonedas
No solo los inversores tienen obligaciones. Las plataformas de criptomonedas que operan en España, o que tienen usuarios residentes en el país, también deben cumplir con requisitos de información. Esto incluye la comunicación de datos sobre operaciones y saldos de sus usuarios a la Agencia Tributaria mediante los Modelos 172 y 173 para facilitar la labor de fiscalización.
Consecuencias de no declarar
Las infracciones en la declaración de criptoactivos pueden acarrear sanciones significativas. Las multas pueden variar desde porcentajes sobre el monto no declarado hasta cifras fijas elevadas, especialmente en el contexto del Modelo 720, aunque como se mencionó, las sanciones han sido revisadas. Además de las sanciones económicas, la falta de declaración puede generar intereses de demora y procedimientos de inspección más exhaustivos por parte de Hacienda.
Recomendaciones finales para inversores
Para asegurar un correcto cumplimiento fiscal, se recomienda a los inversores en criptomonedas:
- Mantener registros detallados: Anotar cada transacción, incluyendo fechas, montos, tipos de criptomoneda y plataformas utilizadas.
- Utilizar herramientas de seguimiento: Plataformas y software fiscal diseñados para criptoactivos pueden simplificar enormemente la recopilación de datos.
- Consultar a expertos: Dada la complejidad y la evolución constante de la normativa, la asesoría de un profesional fiscal especializado en criptomonedas es invaluable.
- Estar informado: Mantenerse al día con las actualizaciones legislativas que puedan afectar la tributación de los criptoactivos.
La declaración de criptomonedas en España es un requisito legal que demanda atención y precisión. Un enfoque proactivo y bien informado es la clave para evitar problemas con la administración tributaria y disfrutar de las ventajas de la inversión en el emergente mundo de los activos digitales.