La explosión de los productos financieros basados en blockchain está redefiniendo el panorama de la inversión, atrayendo a gigantes como VanEck, Fidelity, BNP Paribas y Apollo. El valor de los activos en fondos basados en blockchain casi se ha triplicado en un año, pasando de 11.1 mil millones de dólares a cerca de 30 mil millones de dólares. Sin embargo, este crecimiento exponencial no está exento de riesgos bien conocidos, similares a los observados en anteriores euforias del mercado.
La tecnología blockchain promete una revolución financiera, con productos más económicos, rápidos y eficientes. No obstante, la historia nos enseña que la democratización financiera, prometida por fenómenos como el auge de las SPAC, la moda de los REIT no cotizados y la ola de las ICOs en criptomonedas, a menudo ha dejado a los inversores en situaciones desfavorables. Cuando los nuevos canales de distribución se combinan con el entusiasmo desmedido, surgen oportunistas que ofrecen productos más arriesgados, costosos o menos transparentes que sus pares tradicionales.
El potencial y los desafíos de la tecnología blockchain en finanzas
La capacidad de blockchain para reducir costos, aumentar la transparencia y habilitar nuevos vehículos de inversión es innegable. Sin embargo, su adopción masiva también plantea la posibilidad de que esta tecnología se utilice para reciclar estrategias fallidas del pasado o para justificar tarifas elevadas bajo el pretexto de la “innovación digital”. Esto podría resultar en productos que no ofrecen una mejora real sobre sus equivalentes tradicionales, o incluso peor, que imponen costos más altos y protecciones más débiles a los inversores.
Es crucial que los inversores recuerden el adagio: Timeō Danaōs et dōna ferentēs – “Temo a los dánaos incluso cuando traen regalos.” Si bien los vehículos nativos de blockchain genuinos pueden ofrecer mejoras significativas, como una fijación de precios más eficiente y rendimientos continuos, la cautela es fundamental ante productos que invocan la promesa de blockchain para simplemente renombrar estructuras financieras antiguas sin proporcionar beneficios sustanciales. La tarea del inversor es discernir el verdadero progreso del caballo de Troya.
Claves para identificar fondos on-chain auténticos y evitar estafas
Evaluación de la estructura de tarifas
Una prueba fundamental para diferenciar un producto innovador de uno engañoso es la estructura de tarifas. Los procesos post-negociación ejecutados en la red blockchain deberían reemplazar a los intermediarios, lo que se traduciría en una reducción de costos. Si el ratio de gastos totales es superior al de los productos financieros tradicionales, se debe ser extremadamente cauteloso. Stephen Diehl, un crítico destacado de activos digitales, ha señalado ejemplos claros:
“El fondo de mercado monetario tokenizado de BlackRock cobra entre 20 y 50 puntos básicos en comisiones de gestión. La versión no tokenizada cobra tan solo 0.12 puntos básicos. Eso es hasta 42 veces más caro.”
Los inversores no deberían pagar más por simples “palabras de moda”.
Análisis del propósito y la estructura del producto
Es primordial examinar qué productos se están tokenizando y por qué. ¿El emisor está tokenizando un producto porque ofrece beneficios genuinos a todas las partes involucradas, o blockchain es simplemente un nuevo canal de distribución para productos excesivamente complejos y opacos? Los fondos privados que antes estaban restringidos a inversores minoristas no deberían reaparecer de repente como “ofertas exclusivas de blockchain”, cobrando tarifas de nivel institucional por activos subyacentes ilíquidos. Hay una razón por la que la innovación de productos inicial se ha centrado en estructuras de fondos simples, como los fondos del mercado monetario.
Los productos con retornos sospechosamente altos o una estrategia de inversión poco clara merecen una escrupulosa investigación. La estructura del producto también revela mucho. Una seguridad emitida directamente en la cadena desde su origen debería ser más eficiente y reducir drásticamente los gastos operativos. Por otro lado, un valor tokenizado es un activo existente replicado en una blockchain, que a menudo replica los costos de las finanzas tradicionales al mantener los procesos y atributos del producto fuera de la cadena. Los emisores deben ser explícitos sobre la estructura de sus productos on-chain y lo que esto implica para los costos, los derechos de los accionistas y la liquidez.
Democratización y protección del inversor en el entorno digital
La verdadera democratización de los mercados de capitales implica un acceso más amplio y menores barreras de entrada para los inversores, sin sacrificar las protecciones. No es suficiente aceptar la palabra de la industria; es fundamental observar la compresión de costos y la participación de instituciones tradicionales de confianza. Un ejemplo reciente es la prueba de concepto de Moody’s, que buscó integrar sus calificaciones de bonos municipales en valores tokenizados. Un bono municipal simulado fue tokenizado con una calificación crediticia adjunta al activo en la cadena, lo que demostró cómo los datos fuera de la cadena pueden ayudar a escalar los productos de valores en la cadena con mayor transparencia. La integración de un sistema de calificación estándar de la industria dentro de un conjunto de productos novedosos proporciona a los inversores un punto de referencia familiar y confiable.
En abril de 2025, el presidente de la SEC, Paul Atkins, enfatizó la importancia de “aprovechar la tecnología blockchain para modernizar aspectos de nuestro sistema financiero” y subrayó su expectativa de “enormes beneficios de esta innovación de mercado para la eficiencia, la reducción de costos, la transparencia y la mitigación de riesgos”. Esto debe hacerse en el contexto del objetivo de la SEC de mantener la protección de los inversores. SIFMA reiteró en septiembre la importancia de preservar las protecciones de los inversores en medio de la modernización del mercado.
Aunque los primeros resultados de la tecnología blockchain prometen estos beneficios y mercados más eficientes en costos, no es una panacea para el espectro de charlatanes, desde oportunistas comunes hasta actores maliciosos. Los inversores deben aplicar la misma vigilancia en los mercados digitales que en los tradicionales: leer los prospectos de los fondos, analizar los ratios de gastos y exigir terceros neutrales que proporcionen los datos de mercado y la confianza necesarios que son fundamentales en los mercados tradicionales.
Si los emisores, inversores y otros participantes del mercado son conscientes de estos estándares a medida que los mercados se modernizan, los mercados digitales tienen el potencial de ofrecer la eficiencia y la verdadera innovación que la “democratización” ha prometido.