La desconexión presidencial con el ecosistema de activos digitales
La presidencia de Javier Milei en Argentina, a pesar de las elevadas expectativas iniciales de la comunidad de activos digitales, no ha priorizado la inclusión de las criptomonedas en su agenda política principal. Según figuras influyentes en el ámbito Bitcoin del país, esta situación se debe, en gran medida, a un conocimiento limitado del presidente sobre la tecnología subyacente y sus diversas aplicaciones.
Durante una reciente mesa redonda organizada por la Conferencia Latinoamericana de Bitcoin y Blockchain (LABITCONF), participantes como Carlos Maslatón, un prominente maximalista de Bitcoin, y Ramiro Marra, exmiembro del partido oficialista «La Libertad Avanza», coincidieron en que el actual gobierno no parece tener planes de impulsar de manera significativa la industria cripto en el corto y mediano plazo.
Expectativas vs. realidad: El sentir de la comunidad cripto argentina
Al asumir la presidencia en 2023, la comunidad de activos digitales en Argentina albergaba optimismo. Existía una fuerte anticipación de que la administración de Milei, con su arraigada adhesión a los principios de la Escuela Austriaca de Economía —que promueven el libre mercado y la intervención gubernamental mínima—, abrazaría Bitcoin por sus características descentralizadas y su naturaleza no soberana. Se esperaba un fomento activo de la innovación basada en blockchain y una posible legalización del uso de activos digitales para transacciones cotidianas.
Argentina ha sido un terreno fértil para la adopción de criptomonedas desde 2011, con aproximadamente el 20% de su población utilizándolas como una herramienta esencial para mitigar los efectos de la inflación y los controles financieros. En este contexto, el respaldo de Milei al sector habría representado un impulso fundamental. Sin embargo, desde su investidura, no se han materializado iniciativas concretas para integrar una agenda cripto en su plan de gobierno.

La perspectiva de expertos: Falta de entendimiento y experiencia en el gabinete
Carlos Maslatón, abogado, analista financiero y veterano de Bitcoin en Argentina, atribuye directamente la inacción gubernamental al limitado conocimiento del presidente Milei sobre Bitcoin. Aunque Maslatón colaboró estrechamente con Milei tras unirse a La Libertad Avanza en 2021, actualmente se ha distanciado debido a desacuerdos internos.
Maslatón relató que, a pesar de haber conversado extensamente con Milei sobre Bitcoin en los años 2013 o 2014, el presidente, aunque atento, no habría logrado captar plenamente la esencia de esta tecnología. «Es un economista muy conocedor de la moneda fiduciaria, a pesar de su repudio ideológico hacia ella como liberal», afirmó Maslatón, sugiriendo una dualidad en la visión económica de Milei.
A esto se suma la ausencia de figuras dentro de la administración que demuestren un entendimiento profundo o un interés proactivo en los activos digitales. Inicialmente, Diana Mondino, la Ministra de Relaciones Exteriores designada por Milei, fue la única en su gabinete con cierta familiaridad con las criptomonedas, mostrando una postura favorable a la descentralización de Bitcoin.
Pocos días después de su asunción, un decreto presidencial que desregulaba ampliamente la economía fue interpretado por Mondino en redes sociales como una medida que permitiría el uso de Bitcoin o cualquier criptomoneda en contratos privados. No obstante, su influencia en este ámbito se vio interrumpida tras solicitarle Milei su renuncia en octubre de 2024. Desde entonces, ningún otro miembro del gabinete ha exhibido un nivel de experiencia similar en esta área.
El desconocimiento en el poder legislativo
Ramiro Marra, legislador de la ciudad de Buenos Aires y exmiembro de La Libertad Avanza, extiende esta preocupación al ámbito legislativo. Según Marra, el desconocimiento sobre criptomonedas entre los miembros del Congreso es preocupante, lo que plantea un riesgo significativo para cualquier intento de regulación.
«Basado en mi experiencia, al hablar con políticos que ocupan cargos en el poder legislativo, no puedo encontrar a nadie que sepa algo sobre [cripto]… Por eso creo que hablar de regulaciones es un riesgo muy serio, porque lo pones en manos de personas que son completamente ignorantes», sentenció Marra.
Tanto Marra como Maslatón coinciden en que la mayoría de las iniciativas para el beneficio de la industria cripto deberían nacer del sector privado. Sin embargo, en el contexto actual de controles de capital en Argentina, consideran indispensable que el Poder Ejecutivo implemente ciertas reformas para permitir el crecimiento del sector.
Los controles de capital: Un obstáculo para el crecimiento cripto
Aunque el gobierno de Milei ha relajado ciertas restricciones de divisas para los ciudadanos, persisten los controles sobre el comercio internacional y el movimiento de capital de inversión. Maslatón ha criticado vehementemente estas restricciones, considerándolas la principal barrera para el flujo libre de divisas extranjeras y una oportunidad perdida para aprovechar la tecnología blockchain como un verdadero motor de desarrollo económico.
El experto sugiere que, de estar en el lugar del presidente, habría emitido un decreto declarando a Argentina como el «país número uno pro-Bitcoin en el mundo». Una medida de este tipo implicaría ordenar a bancos y neobancos «facilitar y de ninguna manera obstaculizar los acuerdos cripto en el lado fiat».
Esta acción permitiría a individuos y empresas convertir libremente sus criptomonedas, como Bitcoin o stablecoins, a pesos argentinos o viceversa, a través del sistema bancario formal.
«Para hacer eso, tienes que proporcionar libertad de entradas y salidas de capital. No sé por qué [Milei] no quiere hacer eso o por qué le tiene tanto miedo», expresó Maslatón, afirmando que «solo con eso [el mercado cripto] habría explotado; habría sido una bomba. Sin mencionar las consecuencias políticas favorables para el gobierno que esto habría traído. También tienen la oportunidad de hacerlo ahora, por supuesto».
El futuro dirá si el gobierno de Milei reconsiderará la relevancia de la industria cripto y su potencial transformador para la economía argentina.