El impulso del sector privado por la tecnología blockchain en el Reino Unido
Una coalición de influyentes grupos industriales del Reino Unido ha enviado una clara misiva al gobierno: la tecnología blockchain debe ser un pilar fundamental en el inminente acuerdo de “Tech Bridge” con Estados Unidos. Esta iniciativa, informada por Bloomberg antes de la visita de estado del presidente estadounidense, subraya la creciente importancia estratégica de las tecnologías descentralizadas en el panorama financiero y tecnológico global. La advertencia es contundente: excluir los activos digitales de este acuerdo bilateral podría marginar al Reino Unido en la configuración de los estándares financieros del futuro.
La carta, dirigida al Secretario de Negocios Peter Kyle y a la Secretaria Económica del Tesoro, Lucy Rigby, quien supervisa la política gubernamental de criptomonedas, enfatiza que la ausencia de blockchain representaría una “oportunidad perdida”. Las organizaciones, que abarcan los sectores financiero, tecnológico y criptoactivo, argumentan que otros mercados, particularmente en Oriente Medio y Asia, están avanzando decididamente en la adopción y estandarización de estas tecnologías. Mantenerse al margen podría costar caro al Reino Unido en términos de liderazgo e influencia.
La relevancia estratégica de stablecoins y tokenización
Los grupos industriales resaltan la importancia crítica de las stablecoins y la tokenización para ambas economías. La tokenización, que implica la representación de activos del mundo real (RWA) como bonos o depósitos bancarios en registros distribuidos (DLT), promete revolucionar los mercados financieros al reducir los ciclos de liquidación y democratizar el acceso para los inversores. Por otro lado, las stablecoins, criptomonedas diseñadas para mantener un valor estable en relación con monedas fiduciarias y respaldadas por reservas líquidas, ya están consolidando su presencia en las finanzas tradicionales, ofreciendo una mayor eficiencia en los procesos de pago y liquidación.
El Reino Unido ha intensificado sus esfuerzos para establecer un marco regulatorio robusto en este ámbito. En abril, el HM Treasury publicó la Orden de Criptoactivos 2025, integrando a exchanges de criptomonedas, custodios y emisores dentro del alcance de la Ley de Servicios y Mercados Financieros. Paralelamente, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) ha iniciado consultas sobre la concesión de licencias para la emisión de stablecoins y la custodia de criptoactivos, además de esbozar un régimen prudencial que aborda el capital y la conducta de las empresas del sector. Adicionalmente, el Parlamento está evaluando el Proyecto de Ley de Propiedad (Activos Digitales, etc.), que busca reconocer jurídicamente las criptomonedas como propiedad y extender la supervisión a servicios de custodia y préstamos. Estas medidas, en conjunto, buscan proporcionar certeza legal y armonizar la regulación británica con los estándares globales emergentes.
Las implicaciones del “Tech Bridge”: alineación regulatoria y competitividad global
Los grupos de presión consideran el acuerdo bilateral “Tech Bridge” como una coyuntura estratégica para sincronizar los estándares regulatorios con Washington. Estados Unidos, bajo la administración actual, ha mostrado un creciente interés en los activos digitales, y en julio aprobó una legislación histórica para stablecoins respaldadas por fiat, ofreciendo un marco federal a los emisores. Sin una claridad regulatoria similar, el Reino Unido corre el riesgo de rezagarse frente a mercados como EE. UU., el marco MiCA de la Unión Europea y las iniciativas piloto en Asia y Oriente Medio.
Organismos internacionales, como el Consejo de Estabilidad Financiera, también están impulsando la modernización financiera. Han destacado la necesidad de pagos transfronterizos más ágiles y económicos, señalando que las transferencias internacionales de fondos continúan siendo costosas y lentas. El Banco de Pagos Internacionales ha pronosticado que stablecoins, depósitos tokenizados y monedas digitales de bancos centrales (CBDC) coexistirán, lo que acentúa la importancia de la interoperabilidad y las garantías compartidas en el ecosistema financiero global.
La ambición del ex Primer Ministro Rishi Sunak en 2022 de posicionar a Gran Bretaña como un “centro global para la tecnología de criptoactivos” aún no se ha consolidado por completo mediante un régimen integral. Esta brecha subraya la urgencia del impulso actual de la industria. Sin una estrategia coordinada, las empresas del Reino Unido podrían enfrentar “entornos regulatorios fragmentados, un acceso restringido a mercados transatlánticos profundos y crecientes presiones competitivas”, según advierten los grupos.
Desafíos internos y el futuro de la tokenización en el Reino Unido
A pesar del optimismo, el sector blockchain en el Reino Unido enfrenta desafíos internos. Informes de la industria, como los de BeInCrypto, han señalado que las futuras normativas fiscales (esperadas para 2026) obligarán a las plataformas a reportar datos de clientes a HMRC bajo el Marco de Reporte de Criptoactivos de la OCDE, lo que plantea preocupaciones de cumplimiento y privacidad. Además, las restricciones al acceso minorista a notas vinculadas a criptomonedas han frenado la adopción, aunque la FCA ha indicado su intención de revisar estos límites.
El “Tech Bridge” se perfila como una prueba decisiva para la ambición del Reino Unido de liderar la configuración de los estándares de activos digitales, en lugar de simplemente adoptarlos. La inclusión de blockchain en este acuerdo no solo alinearía a Londres con la evolución de la política estadounidense, sino que también señalizaría la intención de Gran Bretaña de competir activamente en la vanguardia de la tokenización y los sistemas de dinero programable, consolidando su posición como un actor clave en la economía digital global.